Tuesday, January 17, 2012

Lo que trajo la Metamorfosis

SIEMPRE SE OLVIDA ALGO de Virgilio Piñera.
 De izquierda a derecha: Alexander Otaola, Joel Rod y
Zulema Cruz. Photo by José Soriano
Leo un email enviado desde La Habana cuyo asunto decía Ya comenzó el Año Virgiliano. Me cuesta pero tengo que aceptar que hasta se haya creado una comisión organizadora para celebrar el centenario de Virgilio Piñera, figura relevante de las letras y el teatro cubano, quien en vida fuera renegado al ostracismo por su ideario y su conocida homosexualidad. Le comentaba el tema a una amiga de la Isla de visita por Miami quien me repostaba apelando a la dialéctica, la rectificación y los cambios deseados. ¡Claro que es bueno para nuestra cultura reconocer las huellas que dejaron sus intelectuales! pero en ninguna de las notas leídas encontré una simple oración de disculpas. Bueno, qué esperar de los isleños del Caribe cuando el propio resucitado escribiera desde el año 1943 aquel verso que decía “La maldita circunstancia del agua por todas partes/ me obliga a sentarme en la mesa del café”, ¡quién mejor que él para conocer el peso de su Isla y sus coterráneos!

Simultáneamente venían a mi mente las letras que Reinaldo Arenas (otro ninguneado por las instituciones) dedicaba a Virgilio en su ‘Antes que Anochezca’. Como amigo y conocedor de su obra lo desnuda con su irreverente pluma y hasta lo sitúa como el gran ausente en su propio funeral:

“Virgilio Piñera, a pesar de su extraordinaria obra, ya entonces publicada, y de toda su fama, entraba, sin embargo, en la categoría de la loca de argolla1; es decir, tenía que pagar muy alto el precio de ser maricón. Fue recogido a principios de la Revolución y llevado al Morro donde, gracias a la intervención de altas personalidades, (…) pudo salir de la cárcel. Después fue mirado siempre de reojo y sufrió incesante censura y persecución. Como loca de argolla era un personaje extremadamente auténtico y él sabía afrontar el precio de esa autenticidad.
(…) Detestaba cualquier elogio a su obra, detestaba también la alta retórica (…) Era homosexual, ateo y anticomunista.
(…) Virgilio era además feo, flaco, desgarbado, antirromántico. (…) Virgilio veía a la Isla en su terrible claridad desoladora (…)
(…) Representaba al eterno disidente, al inconforme constante, al rebelde incesante (…)”


Al parecer, la moda de los homenajes también llegó a la Universidad de Miami, y en el marco de un congreso internacional de Teoría y Práctica del Teatro Cubano en el Exilio se celebró a Virgilio con conferencias y representaciones escénicas.

Asistí a la clausura teatral, una obra que según el director de la puesta, Yoshvani Medina, es uno de los textos menos conocidos del dramaturgo: ‘Siempre se olvida algo’ en el ArtSpoken Center. La escenificación es tan absurda como la vida de su autor, genera situaciones de humor y nos subraya con fuerza los rostros de la doble moral que asumen los seres humanos ante inverosímiles situaciones, tan actual como cuando fue escrita.

Me hubiera gustado mucho que en La Habana la apertura de este Año Virgiliano se hubiese iniciado con ‘Siempre se olvida algo’, como la gran disculpa para recorrer los caminos de la amnesia colectiva “sin yodo y sin aspirinas”.

1Arenas, Reinaldo. Las cuatro categorías de las locas. Antes que Anochezca. Página 103.  TusQuests Editores. 9.a edición: diciembre 2001.

2 comments:

  1. Donde quiera que Virgilio este debe de estar muy contento pues el actor es un figuron y Virgilio sentia pasion por estas cosas, no era bobo.
    No conocia de esa obra de Virgilio la busque en Wikipedia pero parece que no es de lo más conocido, lo importante es que la han rescatado. Creo que tienes razón al cuestionar que ahora somos dialecticos y que es momento de cambio, es como decir que siempre se esta a tiempo para paliar una enfermedad crónica, mejora pero no se cura y la curación parte del reconocimiento de lo que condiciono tanto olvido y dolor y la identificación de quienes tenían la máxima responsabilidad, lo demás son simples salidas para justificar la evidente catastrofe sin límites que no sólo alcanza lo material (ayer se derrumbo espontaneamente un edificio en Infanta y Salud, 3 muertos y 14 heridos) también ha sido devastadora en el plano personal y humano.
    Virgilio estará riendo con su peculiar sentido del humor desde donde quiera que este, y diciendo "Si vas a comer, espera por Virigilio" titulo de una obra de teatro hace años puesta en escena acá donde recreaba la vida de este cuando hacia la cola en la cafeteria del Hotel Capri con sus amigos. Esta obra que gano todos los premios de teatro del año en que se estreno, era un testimonio de la personalidad de este grande del Teatro cubano; otra prueba de lo rescatada que fue su obra en esos años de la decada del 90 era un monólogo que interpretaba la recien fallecida actriz cubana Adría Santana de Aberlardo Estorino "Las penas saben nadar" que lo llevo incluso a NY y decia en un momento "dejen en paz a Virgilio".
    Esto es lo que encontre sobre la obra de Milián que hizo época y se repone una y otra vez:
    "Siempre Virgilio (Roxana Rodríguez,2011-08-26)
    Para aquellos lectores-espectadores que conocieron al escritor de La Isla en peso, y otras obras, a partir de las páginas de sus libros y no, además, por escuchar en su voz las lecturas de sus textos o recrearse con sus escenificaciones y disertaciones filosóficas, Si vas a comer, espera por Virgilio, de José Milián, resulta una puesta en escena impactante, genuina, sugerente en el más exacto sentido del término."
    "Si bien la partitura dramática abraza el ámbito de lo testimonial, no deben desdeñarse los matices biográfico-históricos de Si vas a comer…, que con refinado humor contextualiza e identifica una etapa compleja de la cultura nacional: las décadas de los 60 y 70 del siglo XX."
    "Los hilos de la trama versan en torno a las conversaciones y encuentros del joven dramaturgo que fuera José Milián en aquel entonces con el ya consagrado Virgilio Piñera."
    "¿Y quién es Ella? Con toda certeza la muerte, tal vez el ojo acusador de la sociedad o el temido censor. Es un personaje ambiguo, sin embargo, muy seductor que defiende con prestancia la actriz Gretel Cazón."
    "Dos candelabros, un búcaro y un cenicero situados sobre una mesa con tres sillas que se ubica arriba de un círculo enorme marcado en el piso, son los únicos elementos que conforman el diseño escenográfico ideado por el director.
    Con ellos, no solo se pretende destacar ese carácter ritual que alude el hecho de la hora de comer, sino enfatizar su esencia simbólica como un suceso eminentemente íntimo, familiar y del que ninguno de los tres protagonistas puede sustraerse.
    Las imágenes que evocan la banda sonora y las luces concebidas por Enrique Jaime y Marvin Yaquis, respectivamente, se alzan como un personaje más en la puesta; en tanto, despiertan emociones en el auditorio y sirven de marco referencial de una época pocas veces llevada a las tablas."
    "Si vas a comer, espera por Virgilio no resulta solo un merecido tributo al teatro y sus hacedores, es también un canto a la amistad, la sinceridad y un justo homenaje a la vida y la creación literaria de quien fuera el precursor de la modernidad en el teatro cubano."

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  2. Tuve la dicha de conocer a Virgilio Piñera en casa del grabador Antonio Canet, en década tenebrosa 70-1980.En su salón no faltaba te negro ruso y pan-duro.Allí recuerdo a "M. Barniz" o la Mimí Yoyó, derrochando puro "glamour".Mientras Piñera, en primer lugar no dijo una sola palabra de literatura, extremandamente ocurrente y sencillo.A cien años de su nacimiento honrarlo es un buen comienzo del año 2012.Saludos y gracias Soriano.

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